Una de las actividades de la Semana Internacional de las Personas con Discapacidad, que celebró el pasado mes de diciembre, quedó en la memoria de todos los que asistimos a la Sala Simón Bolívar del Centro Nacional de Acción Social por la Música.
Allí se presentó el espectáculo Colores que nos unen que, más que un concierto, fue un verdadero canto a la inclusión. La maestría de Christian Vásquez no sólo quedó testimoniada al dirigir la Orquesta Sinfónica Juan José Landaeta, sino en su capacidad para crear un repertorio capaz de integrar en el escenario a un grupo de jóvenes y niños con síndrome de Down como protagonistas, junto a otros sin esa condición, quienes ofrecieron un espectáculo de altura.
Cada capítulo se convirtió en un torrente de emociones. En la primera parte estuvo el trompetista Daniel Coronado, ganador de la X Edición del Festival Internacional de la Canción Punta del Este. Como intérprete de la trompeta fue solista de una composición de Haydn y después cantó «Estar junto a ti», composición con la que triunfó en Uruguay.
La música en tres actos
El desfile de las colecciones de EPK y Melao, narró una historia en tiempos de Navidad y contó con la participación de los niños, jóvenes y adultos con síndrome de down de Fundadown Venezuela, quienes modelaron los diseños mientras que en el escenario iban armando tres actos marcados por tres composiciones: el cuarto movimiento de La Pastoral de Beethoven, el Danzón N° 2 de Arturo Márquez y la Suite del Cascanueces de Tchaikovsky.
Pudimos ver cómo aviones de papel se transformaban en hilos de conexión con el público; un árbol de papel se llenaba de estrellas y de regalos que iban acumulándose a sus pies, gracias a estos actores y modelos.
Un director que llegó de Mérida
Christian Vásquez cedió la batuta a José Omar Dávila Durán, un joven merideño que ha hecho de la música su gran pasión y esa tarde dirigió con un ímpetu sinigual y una entrega total. Una de las composiciones fue Venezuela y, para cerrar, Alma Llanera.
José Omar emocionó con sus palabras de agradecimiento, además de ser un vivo testimonio de cómo las expresiones artísticas, en este caso la música, pueden ser un camino a la integración.
Voces e instrumentos
El Coro Infantil de El Sistema interpretó cargo varias canciones navideñas y junto a la orquesta, llenó cada espacio de la Sala Simón Bolívar, dominada en esta oportunidad por los colores de la Navidad.
El concierto fue a beneficio de Fundadown. Lo recaudado se invertirá en apoyar la salud física, psico emocional y social de las personas con esta condición genética.
En esa oportunidad se contó con el patrocinio de Sybven y de Simpletv, así como con el apoyo de Melao, EPK, Pazzo Ristorante, Amigos Sinfónicos y Ambiente XXI.
En todos los asistentes quedó la motivación de continuar siendo entes activos de la integración. Y como lo señaló Ana Beatriz Villegas, presidenta de la organización, “integrar es reconocer los derechos de estas personas a ser felices”.
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