Miles de personas veneran a la Virgen del Valle en todo el mundo en su fecha conmemorativa. En Nueva Esparta es homenajeada durante todo el mes de septiembre. Iglesias católicas alrededor del planeta le celebraron con misas en honor a sus cien años de devoción.
El 8 de septiembre de cada año, los estados orientales y del sur del país, se contagian de una alegría muy especial al unirse en júbilo para festejar el “cumpleaños” de la Virgen del Valle. La isla de Margarita, en el estado Nueva Esparta en particular, se colma de visitantes quienes tradicionalmente esperan esa fecha para visitar a la Virgen y disfrutar los paisajes margariteños plenos de azul y verde. En Nueva Esparta se le celebra durante todo el mes.
El año 2020, rompió la tradición de la procesión por la zona donde habitualmente se realiza (la segunda procesión más grande del país, luego de la Divina Pastora en Barquisimeto), pues a efectos de resguardar a los feligreses del Covid-19, fueron suspendidas las actividades para el público, participando apenas algunas personalidades en la misma. Este año, trató de replicarse esa primera experiencia, pero a pesar de los esfuerzos de las autoridades, Margarita se vio plena de personas rindiéndole homenaje a la Virgen del Valle tanto el día de su bajada, el 1 de septiembre, como el día de la conmemoración como tal.
Un gran número de creyentes se acercó a la Basílica Menor ubicada en El Valle del Espíritu Santo. Otros participaron en varias procesiones marinas con embarcaciones de todo tipo que salieron de diferentes playas; se organizó una ruta ciclística en su honor y se dejaron ver múltiples celebraciones, altares adornados, arreglos florales e infinidad de alabanzas marianas en todo el estado.
Este año, aparte del ya acostumbrado cambio de trajes, la Virgen estrenó corona. La Basílica no dio información oficial sobre la misma, pero en una cuenta relacionada en la red social Instagram, se publicó que había sido donada por una familia de fieles de apellido Rondón Grau y que el trabajo de orfebrería fue realizado y donado por el señor Arcángelo Giandoni.
La Virgen recibe cada año, no solo la visita de sus muchos creyentes, sino un significativo número de obsequios de diferentes partes del país y del mundo, muchos de los cuales pasan a ser exhibidos en el Museo de la Virgen del Valle, que se encuentra justo al lado de la Basílica Menor.
Devoción con historia
La devoción por la Virgen del Valle se estima que se inició en la Isla de Cubagua (perteneciente al Estado Nueva Esparta en el nororiente de Venezuela), cuando en 1526 llegó su imagen procedente de España. La isla gozaba de un auge económico importante por la extracción de perlas, por lo que los colonizadores españoles la mandaron a traer como una figura espiritual. Con el paso de los años, los lugareños comenzaron a adorarla y le dieron el nombre de Nuestra Señora de la Concepción, pero en diciembre de 1541 la pequeña isla fue azotada por un huracán que destruyó la mayoría de las construcciones que había en el lugar, por lo que la Virgen fue llevada a Margarita, y en ese momento fue llamada Señora de la Tempestad.
Hay muchas historias sobre su llegada a la isla de Margarita. Una de las más populares afirma que la imagen de la Virgen fue llevada por el sacerdote Francisco de Villacorta, máximo protector de los indígenas, hasta la Cueva de El Piache, donde vivían los indios Guaiqueríes a quienes nombró sus guardianes. Existe otra que dice que la Virgen fue arrastrada por las aguas hasta las costas donde habitaban estos indios, quienes la ocultaron en la mencionada cueva. Ambas versiones coinciden en que mientras estaba escondida en esta caverna, se evitó que fuese asaltada por los piratas que atacaban la isla de Margarita, saqueaban y se llevaban objetos de valor que conseguían a su paso.
Años más tarde recibió el nombre de Virgen del Valle, debido al lugar donde se encuentra su Basílica Menor, el Valle del Espíritu Santo.
El 15 de agosto de 1910 el Papa Pío X, le concedió la Coronación canónica, pero no fue sino hasta el 8 de septiembre de 1911 que el Obispo Antonio María Durán (Diócesis de Santo Tomás de Guayana) realizó la Coronación de la Virgen. En 1921 fue proclamada como Patrona de la Diócesis de Guayana que incluye todo el vasto territorio del oriente y sur de Venezuela, por lo que se celebran 100 años de una devoción que se ha vuelto internacional.