Melissa es un nombre que en Venezuela está vinculado al rock, y de una manera muy especial a una de sus escasas representantes femeninas, que llegó incluso a ser bautizada como la Madonna venezolana.
Actualmente Melissa ha vuelto a estar en la palestra en nuestro país, pero esta vez no pertenece al capítulo musical sino al de la moda, específicamente, al segmento del calzado, porque llegó a Caracas la marca Melissa: un zapato que tiene sus inicios en 1979 cuando, inspirados en las sandalias de los pescadores de la Riviera Francesa, Pedro y Alexandre Grendene Bartelle lanzaron al mercado brasileño unas sandalias totalmente de plástico, que fueron tan populares que muchos la calificaron como “la más amadas de Brasil”.
Partida de nacimiento
Recientemente se presentó en Caracas la marca cuya tienda se encuentra en el Centro Comercial Sambil Chacao y viene de la mano de María Fernanda Robaina, venezolana vinculada al mundo del mercadeo y residenciada en Panamá. Ella fungió de anfitriona en un encuentro que tuvo como escenario el restaurante Manifiesto, en Los Chorros.
Las sandalias nacieron en la fábrica de embalajes plásticos de garrafas de vino Grendene, lo que cambió la finalidad de la marca que se sumó a la potente industria de la moda brasileña. La aceptación del modelo no se hizo esperar y aquella sandalia básica, de trabilla, se hizo transparente, se llenó de color y fue transformándose. No sólo adquirió una estética más compleja y actualizada, sino que también despertó el interés de los “copiones” que saturaron el mercado con remedos poco agraciados.
Creando tendencias
La tecnología también ha sido una aliada de la marca que se interesa en el material, por ello crearon el Melflex, 100% reciclable, en forma de PVC, que aporta más flexibilidad, resistencia y comodidad a los pies. Está compuesto de caña de azúcar y emite en promedio de 20% menos de CO2eq.
En cuanto al diseño, continúan trabajando la línea que les brindó éxito, pero han agregado nuevos modelos, que no solo siguen tendencias, sino que las crea.
También se han aliado con otros diseñadores, concibiendo colecciones singulares, como la de Marc Jacob, Barbie, Jean Paul Gaultier o Undercover, que presentan modelos más arriesgados, con líneas que reflejan los estilismos de cada uno de ellos.
Cuando la marca celebró sus 25 años, montó la exposición Plastic o Rama en el Museo de Arte Moderno de Rio de Janeiro, la cual constó de 90 obras realizadas por diversos personajes famosos que tuvieron como base para su trabajo un par de sandalias blancas que cada uno intervino a su manera. Se vieron desde cristales hasta plumas, así como fotografías cargadas de dramatismo y otras llenas de humor.
Sandalias Melissa en Venezuela
La marca brasileña se acerca al medio siglo y llega a Venezuela de la mano de María Fernanda Robaina. Su objetivo es romper con preconceptos y ofrecer otra visión del calzado, que además de formas y colores posee un olor que se vincula con los chicles. De acuerdo a lo señalado por la firma, se trata de un aroma no tóxico, que proviene de la industria alimentaria. La intención es vincular al usuario con su infancia.
También están sus accesorios, entre los cuales figuran los bolsos, donde el color, la textura y el uso de efectos los hacen más atractivos a la vista.
y Consuelo Uzcategui
y Javier Ollarves
La tienda en Caracas se encuentra en Sambil Chacao, donde se exhibe parte de la colección que se irá renovando con cada temporada. Melissa llegó enarbolando su bandera, basada en que es vegana, sustentable y consciente.
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